Si quieres conocer el valor del dinero, anda y prueba a tomarlo en préstamo.
Franklin
Si quieres conocer el valor del dinero, anda y prueba a tomarlo en préstamo.
Franklin
No es tan útil la historia porque contiene el pasado como porque en ella se lee el porvenir.
La perseverancia refleja siempre el estado de nuestra vida interior, de nuestra filosofía y de nuestra perspectiva.
David Guterson
Bajo la luz idónea y en el momento más oportuno todo resulta extraordinario.
Aaron Rose
El silencio de los envidiosos es el mejor elogio a que puede aspirar un autor.
Santiago Ramón y Cajal
Si una teoría pone límites al amor, lo que hay que cambiar es la teoría.
Teodor Suau Puig
Nadie puede ser esclavo de su identidad, cuando surge una posibilidad de cambio hay que cambiar.
Elliot Gould
La ciencia apenas sirve para darnos una idea de la extensión de nuestra ignorancia.
F.R. Lammennais
Los niños comienzan por querer a sus padres. Al cabo del tiempo, les juzgan. Raramente, si acaso, les perdonan.
Oscar Wilde
Retener de las cosas lo mejor es difícil... Pero basta retener de ellas algo que no sea lo peor.
Huimos de los reproches ajenos, pero los únicos que realmente nos hacen daño son los nuestros.
Khalil Gibran
Toda nuestra crítica consiste en reprochar a los demás el no tener las cualidades que nosotros creemos tener.
Jules Renard
El hombre sabio, incluso cuando calla, dice más que el necio cuando habla.
Thomas Fuller
Es bueno empezar la jornada diaria por una dosis de ternura que perfume las acciones de todo el día hasta la noche.
A. Maurois
Un hombre no trata de verse en el agua que corre, sino en el agua tranquila, porque solamente lo que es en sí tranquilo puede dar tranquilidad a otros.
Confucio
La juventud es una religión de la que uno siempre acaba por apartarse.
Andre Malraux
El estancamiento es el precio de la tiranía: la prosperidad es la recompensa de la libertad.
William Safure
Queremos a nuestros amigos no porque nos diviertan, sino porque nosotros logramos divertirlos a ellos.
Evelyn Waugh
Casi todos nuestros errores son más perdonables que los métodos que discurrimos para ocultarlos.
F. de la Rochefoucauld
Soy el milagro más grande de la naturaleza
Pergamino número cuatro del libro de Og Mandino: